Los acordes del mejor jazz invaden mis sentidos. Desde mis oídos hasta mi ser se empapan de él. Quisiera que nunca acabe, que siempre me acompañe, que los altibajos del piano y los quiebres de la voz de la cantante se queden a mi lado.
Algo así me pasa contigo. Quisiera que se repita el prolongado e inacabable abrazo que recibí de tus brazos. ¡Qué feliz me hiciste sin saberlo! Y qué asombrada y emocionada me sentí.
Voy a salir contigo y no puedo dejar de pensar en ello.
No sé qué irá a pasar, lo único que quisiera es que me acompañes a vivir una hermosa aventura. Y es que creo que eres perfecta para eso, joven y dispuesta (eso creo), capaz de amar hasta el delirio (eso espero).
No eres compañera de trabajo ni mucho menos, eres alguien conocida por azar. Y eso me gusta, porque creo que no tendremos problemas a la hora de vernos. Además, ya pronto se irá la gente que está cerca nuestro y podré enseñarte muchas cosas, si lo quieres.
La verdad es que no quiero ilusionarme mucho contigo y trato de evitar entusiasmarme sin motivos. Creo que dejaré que pase lo que sea, podremos ser amigas, compañeras de una experiencia parecida y nada más o puede que lleguemos a profundizar la relación.
No espero nada, solo el poder compartir contigo mi experiencia y compararla con la tuya. Intercambiar sentimientos ante lo grave de nuestra condición física en algún momento de nuestras vidas y esperar que ello nos una, sin forzar ninguna forma de unión en especial, solo que nos acerque y, en el menor de los casos, contar con una nueva amiga.
Desde aquí hago un brindis por nuestra futura amistad, para que se de. Nada más deseo, por ahora. Quizá después pueda decir que estábamos destinadas a ser algo grande, mejor no quiero adelantarme a nada.
Deséame suerte en esta nueva etapa que trataré de iniciar con ella.
Te aseguro que todo lo que pase (o casi todo) lo contaré por aquí. ¿Con qué fin?, te preguntarás. Solo quiero compartir contigo mi vida, mis éxitos y también mis fracasos para que tú, que eres joven, puedas estar enterada de lo que podría pasar con tal o cual cosa, con ese comportamiento o el otro. Además, con la finalidad de desahogarme, de poder contarte a ti, amiga imaginaria, mis cosas.
Quizás este año sea nuevo en todo sentido para mí. Quizás estrene amiga de aventuras. Si no es así, yo me encargaré de buscar aventuras en lugares nuevos que conoceré. De eso te vas a enterar, también. Quiero hacer una especie de bitácora de lo que sucede conmigo antes que empiece el verano. Voy a contarte, además, que a partir de mañana empiezo, nuevamente, a caminar diariamente mis 25 cuadras.
También pienso viajar cerca para despejar mi mente y espíritu. Todos mis pasos los sabrás. Estoy segura que las aventuras estarán a la orden del día, así que, aunque sea poco, escribiré en este blog todo lo que me pase.
Como todavía no hace calor, quiero irme en busca del sol. Pienso en Chosica, Chaclacayo... quizá un viaje por la selva no me sentaría mal. No lo sé, todavía.
Pronto te enterarás de todo. Y te prometo que tendrás para reírte, emocionarte y, quién sabe, excitarte.
Ya lo veremos, chica linda. Por lo pronto te invito a que no dejes de leer mis notas.
Au revoir.
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